En lo general, alquilar un piso no es una decisión que se toma a la ligera. Según las urgencias y las circunstancias, muchos propietarios demoran en definirse incluso hasta abandonar la idea y se inclinan por vender. No obstante, muchos con una vivienda a disposición finalmente optarán por alquilar y recurrirán a tus servicios como agente inmobiliario. En este punto, las disyuntivas con las que llega el eventual cliente a tu oficina, son muchísimos. Deberás sacar a relucir todos tus conocimientos y estrategias como asesor y guía. En este artículo de Oi Real Estate, veremos juntos cómo conseguir el inquilino perfecto para tu cliente propietario. Te recomendamos leer la nota hasta el final para conocer mucho más. ¿Nos acompañas?

SOS – Necesito alquilar mi piso

En el imaginario colectivo disponer de una propiedad ociosa equivale a la solución de los problemas económicos de base para el propietario. Sin embargo, quien cuente con una vivienda disponible para el lucro, sabrá que no todo es color de rosa. Son muchas las opciones que aparecen en el horizonte. ¿Es mejor vender u ofrecer en alquiler? ¿Cuál es la modalidad de arrendamiento más conveniente? ¿Qué estudio de campo se debe realizar antes de tomar mi decisión?

Finalmente, el propietario se decide a alquilar su piso. Cuando esto ocurra, muchos de aquellos interrogantes se decantarán y solo se deberá decidir por el tipo de alquiler más conveniente para sus intereses. Las modalidades de alquiler más indicadas para una propiedad dependerán principalmente de sus características. Veamos tres de dichas modalidades, antes de revisar cómo alquilar tu piso al inquilino ideal:

1 Alquilar en modo turístico

Si la propiedad se encuentra ubicada en la zona costera o en un sitio netamente turístico, estos casos suelen ser los que menos dudas presentan. Existen agencias con dispositivos integrales de arrendamientos para turismo. Estos suelen ser temporarios y discriminados por día, semana, quincena, mes o temporada completa. Sin embargo, debe considerarse que España ofrece la posibilidad de que una propiedad pueda ser alquilada como vacacional, inclusive formando parte de ciudades ultra urbanas como Madrid o Barcelona. Es decir, un piso puede ser alquilado también teniendo en cuenta el turismo internacional, temporalmente o a través de la modalidad del tiempo compartido.

2 Alquiler estudiantil

El mercado del arrendamiento estudiantil es una de las opciones actuales más recurrentes. ¿El piso en cuestión se encuentra en una zona cercana a los polos universitarios? Entonces sería conveniente evaluar la posibilidad de tener como inquilinos a los jóvenes provenientes del interior del país que eligen a las ciudades para desarrollar sus estudios colegiados. Estos alquileres suelen ser por temporada de curso, renovables año a año. Si se tratara de un piso espacioso y con varias habitaciones, debería estudiarse la idea de convertirlo en un apartamento de uso compartido.

3 Alquiler convencional

Como sea, cualquiera de estas características puede ser suplida por la modalidad del alquiler convencional. Contratos renovables, para vivienda habitual, con costes estipulados según la comunidad y atenido a las regulaciones legales pertinentes. Nos referiremos a este caso puntual en horas de hallar el inquilino perfecto para tu cliente propietario.

El inquilino perfecto para tu cliente propietario

Hallar un inquilino ideal para tu cliente no es tarea sencilla. Sin embargo, considerando una serie de premisas, podrás encaminar esa búsqueda de la manera adecuada. ¿Qué espera todo propietario de su futuro arrendatario? Pues solo dos cosas:

  1. Que trate al piso que alquila con el mismo respeto con el que trataría al suyo.
  2. Que cumpla puntualmente con los pagos mensuales de alquiler.

Arrendadores y arrendatarios poseen deberes y derechos. La gran mayoría de los inquilinos están dispuestos a cumplir con el contrato que firmarán a rajatablas y acorde a sus posibilidades económicas.

Elaborar un perfil de inquilino

Para lograr dar con el inquilino ideal, antes que otra cosa, deberías establecer los parámetros que lo definan dependiendo de las expectativas del propietario, que al fin y al cabo es quien ha solicitado los servicios de tu agencia inmobiliaria. En pos de ello, formúlate los interrogantes necesarios que te lleven a una conclusión.

  • ¿Se tratará de una familia numerosa, con hijos?
  • ¿Aceptarías mascotas?
  • ¿Prefieres una pareja enfocada en sus carreras profesionales?
  • ¿Adultos mayores, o jóvenes emprendedores?

Son muchas más las preguntas que puedes hacerte antes de anunciar una vivienda ociosa. Esto sencillamente le hará ganar tiempo a tu cliente propietario y la propiedad comenzará a brindar la rentabilidad que busca prontamente. Por supuesto, no dejes de tener en cuenta la infraestructura del inmueble. Si te gustaría que los inquilinos fueran miembros de una familia numerosa pero el piso cuenta con un solo cuarto de baño y una sola habitación, esa opción acaso no será la más conveniente.

Evaluar solvencia

Has conseguido depurar entre los probables inquilinos más convenientes y comienzas a exhibir la vivienda y recibir visitas. Será fundamental conocer entonces (entre ese perfil de público ya seleccionado) la capacidad de solvencia y regularidad en ingresos de cada interesado. En este sentido, quien reciba a los visitantes debería finalizar la exhibición conociendo estos detalles, al menos en sus puntos esenciales.

Para que la capacidad de solvencia no se convierta al poco tiempo en un problema, existe una máxima en el mundo inmobiliario relacionado al arrendamiento que no deberías desatender. Procura que la renta mensual no supere el 40% de los ingresos del conjunto familiar. Sin temor a resultar invasivo, deberás solicitar contratos de trabajo vigentes, así como recibos por el pago de sueldos de los últimos meses.

Garantías y referencias

Por último, puede que el interesado no logre demostrar la regularidad económica que afirma tener. Recuerda entonces (y teniendo en cuenta las regulaciones de tu comunidad o ciudad) aplicar el uso de la garantía añadida por cuenta de un tercero, por fuera del mes de renta adicional de fianza habitual.

Esta garantía (según la Ley de Arrendamientos Urbanos), es de carácter obligatorio y consiste en un depósito equivalente a una renta mensual. Si la propiedad será utilizada como un estudio o una oficina comercial el propietario estará en posición de solicitar dos o más mensualidades.

Si al culminar el contrato, el inquilino ha cumplido estrictamente con lo estipulado por el contrato de alquiler, entonces el propietario deberá reintegrar dicha fianza. En cambio, si se ha provocado algún daño a la propiedad y esta se mantiene a la hora de devolverla, o si el inquilino ha presentado demoras en el pago, el arrendador seguramente decidirá no devolver dicho monto.

Estas son solo algunas de las nociones elementales al momento de hallar el inquilino perfecto para tu cliente propietario ¿Se te ocurren algunas otras? Nos encantaría que las compartas con nosotros.

Y si te interesó el tópico, no dudes en leer el siguiente artículo:

Oi Real Estate

Escribe un comentario

A %d blogueros les gusta esto: